Durante la pandemia muchas han sido las personas que han visto la necesidad de disfrutar de espacios abiertos en el hogar, esto nos ha llevado a la necesidad de comprar parcelas para poder urbanizar en espacios poco concurridos, alejados de las ciudades. En Martínez-Blanco Abogados hemos recibido gran cantidad de solicitudes de asesoramiento para comprar una parcela, ya que pueden surgir numerosas dudas sobre cómo construir la vivienda, en qué tipo de terreno, cómo afectan los planes generales de ordenación urbana, etc. Por ello, siempre es recomendable acudir a un despacho de abogados expertos en derecho urbanístico, para que tu caso sea estudiado al detalle y puedas realizar la compra con total garantía.
En primer lugar, la compra de una parcela para realizar una vivienda nueva es siempre un proceso largo y complejo, ya que todo va a depender de dos cosas: el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de cada municipio y la naturaleza del suelo donde se encuentre la parcela. En el caso del PGOU, este debe contener las zonas en las que se prevé que en los próximos años cambie la naturaleza del suelo o la construcción de alguna infraestructura. Este último detalle es importante, ya que si es así, cabe la posibilidad que nos expropien parcial o totalmente el terreno o que nos obliguen a derribar parte de nuestra vivienda. Este suele ser el motivo por el que a veces podemos encontrar algunos “chollos”: porque esos terrenos podrían verse afectados por alguna infraestructura pública en el futuro.
Cuando hayamos determinado si el plan de ordenación nos permite construir sin ningún tipo de restricciones debemos acudir a la sede del Catastro para conocer las medidas y lindes oficiales de nuestra parcela. Ya que es habitual que los datos del Catastro difieran de lo que podamos ver en la escritura y especialmente de lo que nos hayan sugerido los vendedores del terreno. Para evitar futuras reclamaciones, debemos encargarnos de conocer a la perfección lo que estamos comprando.
En los datos del Catastro también se nos facilita la información sobre la naturaleza del suelo. Como norma general, sobre suelo rústico es más complicado construir, pero eso no significa que no sea posible. Eso sí, necesitaremos que la parcela cumpla una serie de requisitos que pueden variar dependiendo de la Comunidad Autónoma pero que siempre requerirán que el terreno sea de grandes dimensiones, ya que solo podremos construir en un porcentaje del suelo. Además, también debemos tener en cuenta que, aunque seamos dueños del terreno, no podemos construir libremente.
Otra de las situaciones que se debe estudiar antes de la compra del suelo es la que existan situaciones de servidumbres sobre el terreno o irregularidades en construcciones existentes. Ya que estos derechos podrían obstaculizar nuestra intención de construir u obligarnos a cambiar nuestro proyecto. En cuanto a las infracciones urbanísticas, no debemos confiarnos: el hecho de que exista una construcción en un solar no significa que esta se adecúe a la normativa, por lo que es posible que el Ayuntamiento nos exija su demolición incluso varios años después de la compra.
Como vemos, la compra de una parcela es un proceso en el que hay que estudiar todos los detalles. Además, para evitar futuros problemas, debemos ser conocedores de todas las características y posibles inconvenientes que tenga nuestro futuro terreno. Por eso, si necesitas el mejor asesoramiento urbanístico y realizar tu compra con total garantía, ponte en contacto con Martínez-Blanco Abogados.